El realizador malagueño presenta hoy en la sección oficial a concurso su nuevo documental, una historia de superación.
Hay quien afronta la vida como si fuésemos a estar siempre aquí. Hay quien lo hace como si cada día fuera su último día en la tierra. La decisión es algo privada, personal, respetable. Por eso debe ser duro que no seas tú quien lo decida. Hay también personas a las que les imponen un límite. Un día conocen que tienen una enfermedad y su vida tiene fecha de caducidad. ¿Cómo reaccionar? ¿Cómo enfrentarse a ese inesperado límite? ¿Se puede conseguir una prórroga?
El cineasta malagueño Jorge Peña quiso averiguarlo. Y para ello investigó y trabajó hasta que conoció a Montse, a quienes los médicos daban seis meses de vida. Una noticia que a la mujer le cambió la vida. Pero lejos de enrocarse en sí misma y hundirse; o de lanzarse al vacío para vivir un tramo de vida intensa, Montse decide un careo consigo misma. Decide tomar la situación con hasta cierta normalidad mientras descubre cosas de sí misma y de los que les rodean. Y así lo cuenta en Escocia, documental dirigido por Peña y protagonizado por Montse, que se toma el rodaje como un diario personal que parece servirle casi de terapia. El resultado es Escocia, largometraje documental que se estrena esta tarde a las 19:30 en el Teatro Echegaray dentro del 17 Festival de Málaga de Cine Español.
Pero no hay que olvidar algo: la enfermedad siempre sigue ahí. Y, aunque es una situación difícil, dramática para la protagonista, la película huye de lo fácil: nada de lágrimas, de crisis, de reflexiones filosóficas. Tanto Montse como el director afrontar sus circunstancias mirándolas a los ojos: ella asumiendo y luchando. Él trabajando mucho el guión y dando una lección a la hora de contar historias. Y, así, Escocia se completa casi como un canto a la vida, un largo viaje en un tren que -como en la propia película- sigue adelante. Hasta que, eso sí, un día se detenga. Antes o después. De forma anunciada o inesperada. Como ocurrirá a todos.